Historia de dos presupuestos

En los últimos meses me contactaron para presupuestar dos proyectos en distintos contextos. Fueron dos casos radicalmente distintos a lo que suelen ser mis presupuestos.

En un caso el contacto llegó por medio de un colega que me recomendó. Resulta que la organización que me contacto estaba buscando una persona con perfil de «arquitecto» para trabajar en un proyecto de 3 meses que consistía en armar una especificación técnica/funcional para con eso salir a buscar un proveedor que se encargara de desarrollar un software acorde a la especificación. ¡Recorcholis! tres meses para armar una especificación y que luego otra organización construya acorde. Sinceramente me interesaba trabajar con la organización así que apenas terminaron de contarme la idea les dije: «no creo funcione» y a continuación les ofrecí mi ayuda para armar un plan con mejores probabilidades de éxito. Creo que no lo convencí pues no me han vuelto a llamar 🤷‍♂️.

El otro caso fue bastante distinto me contactaron unos colegas de confianza, con quienes ya he trabajado, para armar una propuesta para un servicio de mentoring/capacitación/acompañamiento. Si bien es el tipo de trabajo que realizo habitualmente en este caso la propuesta era para un trabajo de +4 meses. En general mis propuestas, al menos inicialmente, son bastante más acotadas, unas 10 o 20 horas y luego vamos viendo y extendiendo si resulta necesario. De todas formas, en este caso parece que la propuesta ya está en proceso de aprobación, en un par de semanas les cuento ✌️.